NUTRICIÓN SALUDABLE
¿Haces ejercicio físico habitualmente? ¿En invierno también?
Hay personas que dejan de hacer ejercicio físico en invierno porqué hace frío. Además, en este período del año tendemos a comer más para tratar de entrar en calor.
¿Sabes que realizar actividades deportivas en invierno es muy beneficioso para el organismo?
Quizás los primeros “entrenamientos” o salidas al aire libre puedan parecerte más duros, pero cuando el cuerpo se acostumbre a las nuevas condiciones, responderá mucho mejor al haber ganado fortaleza.
Te cuento algunos de los beneficios que conlleva practicar deporte: correr, bicicleta, patinaje sobre hielo o ruedas, o esquiar a bajas temperaturas.
Beneficios del ejercicio físico en invierno:
- Refuerza el sistema inmunológico: La exposición al frío, junto con el ejercicio físico, aumenta el número de leucocitos.
- Fortalece la actividad cardiovascular: El corazón se vuelve más fuerte al tener que trabajar más para llevar la sangre a todo el cuerpo cuando realiza ejercicio con frío.
- Aumenta el rendimiento físico, la capacidad pulmonar y la capacidad cardíaca: Al realizar ejercicio físico en condiciones climatológicas adversas, el cuerpo se adapta a una nueva situación.
- Aumenta la tolerancia al frío: Practicar deporte en invierno de manera regular llega a conseguir una tolerancia mejor al frío.
- Mejora el estado de ánimo, alivia el estrés, previene estados depresivos y asténicos propios del frío: En invierno es más fácil sentirnos bajos de ánimo a causa del frío y la reducción de las horas de sol. Practicar ejercicio de manera regular consigue que el cuerpo libere hormonas de bienestar. Te ayudará en la menopausia.
- Mayor gasto de calorías: Mantener el cuerpo caliente supone un gasto calórico añadido a las calorías consumidas por el ejercicio físico en sí. El cuerpo debe hacer un esfuerzo extra para regular la temperatura, esto significa que cuando se hace ejercicio al aire libre en invierno, se gasta alrededor de un 30% más de las calorías que cuando se practica deporte con buen tiempo.
- Mayores niveles de vitamina D: Aprovechar al máximo de los rayos de sol ayuda al organismo a producir vitamina D, fundamental para la salud de tus huesos.
Ahora que ya te he convencido a que salgas de casa… ¿Cómo hacer el ejercicio?
- Hacer 10-15 minutos de estiramientos y calentamiento antes de empezar y al finalizar.
- Proteger adecuadamente tu cuerpo y especialmente las zonas más sensibles: la cabeza y el cuello/cogote, los labios, nariz, pies y manos.
- Utilizar ropa adecuada: dicen los expertos que lo ideal son 3 capas: la primera que absorba el sudor pero que no quede húmeda si vas a sudar mucho, la segunda térmica y la tercera, impermeable, cortaviento y transpirable. O, también, puedes llevar ropa de recambio. Pero tu haz lo que creas que es mejor para ti.
- Abrigarse bien al salir y al volver, o antes y después del ejercicio.
- Alimentarse bien antes del ejercicio, pero sin atiborrarse.
- Dejar la pereza en casa.
Nota: una caminata diaria de 30 minutos a paso ligero durante las horas de sol también es un buen ejercicio físico.
Nuestro cuerpo es una fábrica química perfecta.
Nuestro cuerpo sabe lo que tiene que hacer en todo momento y SIEMPRE está funcionando para ti. Trátalo bien. Te responderá genial.
Te invito a que introduzcas algunas pautas fáciles y sanas a tu cuidado personal diario. Algunas de ellas te llevarán solamente unos minutos, otras requieren mayor organización en tu día a día. Escoge las que mejor se acomoden a tu estilo de vida y a cómo quieres cuidar de tu cuerpo. ¿Crees que puedes dedicar un tiempo al día o a la semana a admirar la belleza y genialidad de los alimentos que comes? Encontrar esos momentos llenos de belleza y admiración hacia la Naturaleza que nos cuida es una forma de autocuidado.
Así que, ponte las mallas y manos a la obra. ¿Qué versión te resuena más?
Deja que la creatividad te guíe para hacer tus propias variaciones. Cuéntame ¿cómo te fue?
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Tal como nos aconseja el Dr. Mario Alonso Puig, si queremos cambiar algo en nuestra vida, lo mejor es empezar por algo muy pequeño. ¿Cuál es el paso más pequeño que me atrevo a dar para empezar a cuidar mi dimensión física, mental o el alma? No nos damos cuenta del gran cambio a largo plazo que producen los pequeños cambios que realizamos ahora. Si quieres saber más, en unos días tendrás el curso disponible
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Y, como dice Borja Vilaseca, no creas nada de lo que te digo. Experiméntalo, y decide por ti misma lo que es mejor para ti.
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