Los almendrados, también conocidos como Ammaretti en Italia, son pequeñas joyas de la repostería mediterránea con una historia tan rica como su sabor. Este dulce tiene raíces en la tradición sefardí y árabe, donde la almendra era el ingrediente estrella en postres de textura suave y aromática. Aunque su origen exacto es incierto, se sabe que su historia se remonta siglos atrás, con variaciones que han evolucionado en distintos rincones del Mediterráneo.
A diferencia del mazapán, el almendrado tiene una textura más granulada y siempre adopta una forma redonda, salvo excepciones como los almendrados de Allariz, que presentan un diseño triangular o en grupos de tres círculos unidos. En España, una forma tradicional de servirlos es sobre una oblea fina de harina de arroz o patata, lo que les otorga un toque aún más especial.
No existe una receta única para los almendrados; cada región, cada familia y cada repostero ha perfeccionado su versión a lo largo del tiempo. Sin embargo, los ingredientes básicos suelen ser los mismos: almendra rallada, huevos, azúcar o miel y un toque de limón. Se hornean con una almendra entera en el centro de cada pieza, un detalle que resalta su simplicidad y elegancia.
El almendrado también ha servido de inspiración para otras creaciones icónicas de la repostería. En Francia, su evolución llevó al nacimiento de los macarons, esos pequeños bocados rellenos que hoy en día son sinónimo de refinamiento y sofisticación. En los países árabes, el halva o halawah temar se elabora con una mezcla similar de frutos secos, pasta de dátiles y sésamo, en versiones tanto crudas como cocidas.
El Almendrado en «Vuelta al Mundo en 80 Galletas Saludables»
En mi libro «Vuelta al Mundo en 80 Galletas Saludables», el almendrado ocupa un lugar especial. He creado una receta que respeta la tradición pero con un toque saludable, utilizando ingredientes naturales y técnicas que realzan su sabor y beneficios nutricionales. Si te apasionan los dulces con historia y alma mediterránea, esta versión del almendrado te conquistará. ¡Atrévete a probarlo y descubre la magia de un clásico reinventado!
Ingredientes
para 400 g o para 6-10 personas
- 60 g agua
- 10 g semillas de lino trituradas
- 125 g azúcar moreno, panela, de coco
- 2 g Canela, vainilla, anís verde
- 2 g piel de limón, naranja
- 2 g Sal
- 250 g harina de almendra
- 60 g almendras enteras para decorar
- 10 g vino rancio (opcional)
Consejos
Lo más típico es agregar canela y piel de limón o naranja. Te invito a que pruebes otras combinaciones de especias y cítricos, como por ejemplo anís verde, clavo y canela, o bien, cardamomo y limón. Combina y experimenta los sabores siguiendo la inspiración de tu olfato.
Cómo se prepara
Usa un bol grande para combinar los ingredientes y añádelos en el mismo orden de la lista. Una vez confeccionada la masa, da forma a pequeñas bolas con las manos de la medida de una pelota de golf. Para presentarlos como típicos almendrados, coloca una almendra encima de cada bola aplanándola un poco. Hornea y degusta. Puedes pintarlas con sirope de agave. Puedes comerlas también crudas.
Pon en marcha el horno 5 o 10 minutos antes de hornear, durante la elaboración de la masa o al final. Los hornos eléctricos modernos son rápidos.
Guárdalos a menos de 20 ºC.
Tiempo de preparado: 20 minutos
Tiempo de horneado: 15-20 minutos hasta que se doren
Temperatura Horno: 180 ºC